La formación universitaria en Costa Rica, ha sido la herramienta que ha permitido la calidad y la especialización de la mano de obra del país para los distintos sectores productivos. Eso no es un secreto, y gracias a la formación universitaria se han podido construir grandes cambios dentro de nuestra sociedad. Las universidades públicas como privadas le han dado grandes satisfacciones al pueblo de Costa Rica.
Sin embargo, hoy la sociedad costarricense tiene dos retos vitales, ambos vinculados entre sí, pero cada uno independientemente es un hito histórico para la posteridad. Uno el referendo sobre el CAFTA-RD, y otro la implementación del CAFTA-RD en nuestro querido país. El referendo como instrumento de participación ciudadana se convierte en una forma de expresión civilista, en el cual la educación universitaria debe involucrarse responsablemente como formador de pensadores, libre de adoctrinamientos ideológicos, sino como fomentadores de pensamiento. Deben todas las universidades fomentar la participación de sus estudiantes en el referendo.
El otro gran reto de la Ecuación universitaria es la de modernizar sus programas de estudio, en todas las carreras, de forma tal que ante una eventual aprobación del CAFTA-RD el país pueda dar la mano de obra altamente calificada que se va a necesitar, que sean sus estudiantes profesionales con alta capacidad de análisis y aún más importante que gocen de una visión humanista del mundo, capaces de identificar nuevos retos y oportunidades. Modernización que implica perder el sesgo de si estamos a favor o en contra, sino el de buscar el bienestar del país.
Negociación, administración de personal, biotecnología, bioética, tecnologías de información, economía ambiental, medio ambiente y otros son temas que se deben incorporar a todas las carreras, por el simple hecho de que permiten entender y enfrentar los nuevos retos de la sociedad, ante nuevos problemas que requieren nuevas soluciones.
Solo juntas las Universidades públicas y privadas van a lograr formar el capital humano ético y preparado que el país requiere para la función pública y el motor de la empresa privada. Solo con programas adecuados a la realidad de un mundo globalizado podremos sacar a Costa Rica adelante con un futuro cercano mejor, donde juntos aprovecharemos lo mejor de nuestra sociedad.
Jorge Rodríguez Vives.
Estudiante de la Licenciatura en Relaciones Internacionales.
Universidad Latina de Costa Rica.
Correo Electrónico jrvives121@gmail.com
miércoles, 6 de junio de 2007
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